No "bolberá" a ocurrir.
Es verdad que en un mundo en el que has elegido la pluma para ganarte el pan no puedes cometer faltas de ortografía. Recuerdo un examen de "Teoría y estructura de la información", en primero de carrera. La nota del éxamen fue un 5, pero una pregunta entera me fue cancelada. Hubo un momento en que la profesora tropezó con "Fribolidad". Sí, "Fribolidad" con "B". Fue un error del que, afortunadamente, pude redimirme el 12 de julio de 2005. Pero me remonto a mi etapa más preuniversitaria; el bachillerato. En primero de bachillerato, el que hoy es mi amigo José, Don José Angel, me pedía que me acercara a su mesa durante la entrega de la nota de un examen de valuación para decirme, con una sonrida más de resignación, que había sacado un Sobresaliente y que mi examen hubiese estado perfecto de no haber existido un sistema de puntuación en la lengua española. Veinticinco faltas de ortografía en un comentario de texto me llevaron a la repesca. Para mí, las segundas partes ( académicamente hablando) siempre han sido buenas. Mi último atentado al castellano ha sido escribir en una entrada de mi blog "rebentada". Muchos dirían que tengo un problema con la "b" y la "v". Dirían bien. En cuanto a mi, me alegro de saber que puedo encontrarme con algún "obstaculillo" que me haga la vida un pelín más anecdótica.