Coronado Rey del viento, otra vez.
Volvió a hacerlo y ya no es sólo el unico piloto de F1 que gana un mundial a tan temprana edad, sino el que lo ha ganado dos veces seguidas. Algo que, sin duda, será superado por algún otro piloto. Pero eso ocurrirá dentro de muchísimo tiempo. Seguramente, ni usted ni yo lo veamos. Mas que nada, por que el asturiano es el rotundo campeón del mundo y por que aspira claramente a coronar la élite del automovilismo deportivo mundial durante algunos años más. A principio de temporada se cuestionaba al joven piloto por
cómo soportaría un año de competición con la presión de defender el título de 2005. Pues ha respondido como mejor sabe hacerlo, haciéndonos vibrar en muchas carreras y, un poco más de la cuenta, en otras. Los motores que rebientan y las tuercas que se aflojan solas estuvieron apunto de hechar el freno de mano del R26 en su camino al título. Los españoles y, especialmente, los asturianos, están de celebración . Que corra la sidra por las calles de todo el país. Enhorabuena, crack!